lunes, 26 de diciembre de 2011

colaboracion de miguel cruz vega

A mis amigos y excompañeros de Generación ICAP:
FELICITACIONES PARA TODOS. Permítanme felicitarles por estos días que nos motivan a reafirmar los lazos de amistad, unión, afecto y cariño que sembramos en aquellos años de estudio. Deseo que cada uno (a) de ustedes gocen con cabal salud, unión familiar, armonía y paz interior, pero también deseo que NO cejemos en la búsqueda de nuevos retos y proyectos, que nos lleven a reunificar los esfuerzos pólíticos que habrán de fortalecer los pilares de un México, que hoy más que nunca necesita de cuadros con sólida y profunda formación política, preparados para la integración y cohesión social, más no para la ruptura. Nosotros somos de buena madera, y como los buenos guerreros, fuimos formados "entre las patas de los caballos", macerados con una idelogía consistente. Tenemos todo para triunfar. Tengámos todos un año 2012 colmado de expectativas, pleno de fuerza física, espiritual, mental y emocional, que nos motive a la realización y materialización de todos nuestros proyectos personales, familiares, profesionales y político-sociales. Son los mejores deseos de quien les quiere y aprecia. Reciban todos un cordial abrazo y mi más sincero afecto Su amigoMiguel Angel Cruz Vega y Familia P.D. Por favor ayúdenme a reenviar el mensaje para los compañeros, de momento no tengo el directorio a la mano. Gracias. M.A.

La Jornada de Veracruz

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Miguel Ángel Cruz Vega - sábado, diciembre 24, 2011
Del Virus de Ideas a la Metamorfosis Política
Tal parece que los virus están desatados, primero fueron los trasmisores de la Influenza en el 2009, que al paso del tiempo resultó ser una pifia y gran negocio para megaempresas fabricantes de vacunas, antibacteriales, cubrebocas, etcétera, entre los muchos insumos médicos. El Diccionario Larousse define la palabra virus como a un “microorganismo invisible… germen patológico perceptible al microscopio… responsable de numerosas enfermedades en plantas, animales y en el ser humano”. En términos generales se trata de la propagación de un mal que se trasmite a través de bacterias entre seres vivos, a causa de un agente patológico cuyo efecto puede ser trivial, como una gripe, o tan grave como el cólera, el VIH, o el virus de la influenza A/H1N1.
En esta ocasión, amable lector, voy a comentarle sobre un nuevo virus que ha resultado ser más letal, poderoso y destructor que todos los virus desarrollados en la historia del hombre, se trata del virus de las ideas o virus ideológico, causado por la efervescencia política de los individuos en la sociedad del siglo XXI. El virus de ideas ha tenido su origen en las redes sociales, a partir de acontecimientos en la vida económica, política y social de las naciones. Se ha propagado en ciertos estratos de la sociedad e incubado en las mentes de los internautas, twiteros o feisbukadictos (usuarios del Facebook) con tal consecuencia, que ha llegado a propiciar ya serias crisis políticas en varios países; su evolución ha sido asombroso, pues la gestación del embrión crece alarmante y rápidamente en pocos minutos, como el caso de los twiteros de Veracruz Puerto; con mayor impacto social el movimiento M-15 de la Plaza del Sol en España, que en solo una horas propagó el contagio en sectores de la población altamente receptivos como los ninis, desempleados y sectores inconformes, de alto impacto electoral para el gobierno de Rodríguez Zapatero; otro ejemplo de infección ideológica es el generado por el “despertar de la primavera” de los países árabes; o el “movimiento de los indignados” en varias ciudades europeas y de los Estados Unidos, contagio de propagación global, con mayor efecto en algunas ciudades y menor impacto en otras, pero con un alto contenido de contagio entre las estructuras sociales y abierta confrontación con los anticuerpos de la epidemia, es decir contra las fuerzas del orden público y social. Contagios que han surgido principalmente a partir del año 2010. (Léanse mis artículos: La Jornada Veracruz: 2 de abril 2010 y 22 de mayo 2011).
A diferencia del virus informático, generado por la secuencia de comandos engañosos que se auto-propagan hasta invadir la memoria del disco duro, para dañar el sistema operativo causando estragos en la información de usuarios de la red. Este mal sin embargo tiene remedio: se focaliza y se aísla al virus; la información se puede salvar con un cambio físico de disco duro o una vacuna efectiva que extermine la infección y ponga fin, encripte, o elimine el virus difusor del contagio. Mientras que el virus de ideas, una vez liberado puede llegar a propagarse sin límite de espacio en toda la sociedad a través de efectivos portadores, y sí por el contrario el virus buscará los vacíos del ambiente político y social en la población para arraigarse irremediablemente. Dice el experto en mercadotecnia y propagación de ideas Seth Godin (1999), que “…las ideas están impulsando la economía, enriqueciendo a la gente y sobre todo cambiando al mundo… cuando éstas se organizan son muy poderosas. Una idea estática carece de valor, pero si se organiza, crece e infecta todo lo que toca, se convierte entonces en una idea virus”, es decir, en una idea con poder. La sociedad misma genera anticuerpos de resistencia a campañas comerciales o políticas, ya sea para acceder o neutralizar los efectos de las ideas. Por otro lado, en la propaganda comercial los divulgadores de ideas lanzan sus mensajes-eslogan con alta precisión hacia el grupo geográfico, demográfico o psicodemográfico que desee primeramente dominar, utilizando trasmisores efectivos. Para ellos –los mercadólogos– la comunicación de boca en boca ha perdido valor, ya que ésta se desvanece con el tiempo como cuando se lee un libro y el lector lo comenta con un amigo o varios y estos a su vez ya no lo publicitan. Pero si este libro se lanza a la red a través de un directorio de Hotmail o Yahoo a más de 100 o 150 personas, con el simple clic en el tablero, la noticia o mensaje se difunde y si ésta va infectada con un alto contenido viral o contagio psicológico, lo más seguro es que el efecto de ese mensaje crezca con mayor velocidad y en lugar de perder fuerza progrese hacia otros sectores superiores a los destinados.
Los portadores del virus de ideas son en sí los divulgadores, estos pueden ser mixtos o heterogéneos –cualquier ciudadano común– y por otro lado están los poderosos: son los comunicadores, artistas, empresarios, líderes y los mismos políticos. En el primer grupo están los que cobran por infectar (las agencias), también se les llama promiscuos porque “no dan paso sin guarache”, ellos cobran. En este grupo se encuentran los enemigos de los actores, los resentidos que se esconden en el anonimato de la red y difunden mensajes a diestra y siniestra para demoler la imagen construida del actor; en este mismo grupo también se incluyen los voluntarios o simpatizantes que desean ver derrotado al enemigo o competidor, éstos aportan capital a través de sus negocios, instituciones públicas o privadas y partidarios para infectar a la sociedad con una imagen adversa a la que pretende el actor. En el segundo grupo, el de los poderosos, cualquiera de ellos que lance una idea o mensaje al aire, por el simple hecho de tener un rating público, ya es por naturaleza viral, sea lanzada por la red o televisión y en menor grado por la radio, ya sea el virus positivo o negativo. Por ello se les llama poderosos, por el amplio poder de influencia en ciertos sectores. Ambos grupos saben que las ideas son perecederas, por ello las van actualizando e inyectando con dosis más fuertes de infección para lograr la mayor propagación.
En este año que está por concluir cayeron varios actores políticos, jefes de Estado de países árabes con gobiernos totalitarios y dictatoriales, que no dimensionaron el poder de las redes sociales y sus catastróficos efectos virales, cuyas consecuencias ya vimos cuán letales fueron. Si quienes piensan que las redes sociales no les van a impactar, aquí les dejo esta reflexión para que se pongan a meditar: cuando salgan a escena tienen que medir la trascendencia de sus palabras; visualizar la divulgación de las ideas; hablar con claridad, sencillez, humildad y sin ninguna complejidad. La red es ya una herramienta eficaz que les puede ayudar a llegar al destinatario en muy corto tiempo, rápido y directamente; es el vehículo para llevar a la sociedad brillantes ideas, innovadores y modernos postulados para gobernar, la cual no se debe minimizar. Estamos en el siglo de las ideas, donde lo que importa es el mensaje, el contenido manifiesto dirigido a cambiar la forma de pensar y de actuar en la gente.
cruzvegamacv@hotmail.com
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